domingo, 1 de noviembre de 2015

La Cumbre Escarlata o como Guillermo Del Toro nos vuelve a hablar de fantasmas.

Dentro de los tópicos más tópicos de la historia del tópico se mueve la última película de Guillermo Del Toro protagonizada por Mia Wasikowska (Stoker), Jessica Chastain (Interestellar, El Año Más Violento) y Tom Hiddleston (más conocido como el hermano malo de Thor). Hay que decir lo primero que Jessica Chastain se sale. Se come la pantalla y realiza una interpretación exquisita y con una soltura abrumadora. Lo siguiente es que a mí Mia Wasikowska, a pesar de las muchas críticas que puede suscitar, me gusta. Me gusta su interpretación fría y sus gestos impasibles que rozan la indiferencia  y la apatía, y de nuevo, en esta película, me gusta como aborda al personaje protagonista y como le da vida. El que menos me llamó la atención fue Tom Hiddleston que no es para nada brillante, pero tampoco incorrecto (el clásico ni fu ni fa)

Sin duda nos movemos en un universo que Del Toro conoce y domina, y del que parte de una base muy sencilla y simple: los fantasmas existen. Es una película en forma de cuento gótico, espeluznante y grotesco, sumergiéndonos en escenarios totalmente fríos (literalmente incluso) y fuera de la lógica humana. La trama es simple, es una trama que ya conocemos y que nos hace volver a las historias clásicas de fantasmas. Se trata del espíritu anclado a un evento, o a un lugar que quiere que se sepa la verdad de lo que sucede y para ello se comunica con la protagonista por medio de mensajes típicos: apariciones, aullidos, llantos... Algo muy similar a lo que sucedía en El Espinazo del Diablo (que los que la hayan visto se darán cuenta de la cantidad de guiños que el director le dedica en La Cumbre Escarlata), para mí la mejor película del director (y sí, El Laberinto del Fauno la estoy contando)

En este film conviven todo tipo de historias que son conocidas para el espectador, y los personajes son fusiones de personajes que ya conocemos (Jane Eyre, las historias de Poe, el terror y el suspense clásicos...) pero todo ello cohesionado y reformulado de una manera bastante poética, con una fotografía estimulante y una paleta de colores que realmente dan a conocer un increíble diseño de producción. Lo peor, sin duda es el guión, que no es nada brillante y que si lo fuera podríamos haber tenido otro de esos monólogos únicos con los que Del Toro termina sus películas. Desde luego crea una atmósfera única, con una historia típica.

2 comentarios:

  1. Me ha parecido muy buena, pero el espinazo del diablo es brillante!

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  2. Me ha parecido muy buena, pero el espinazo del diablo es brillante!

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